Salmos 34: 18 Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; Y salva a los contritos de espíritu. 19 Muchas son las aflicciones del justo, Pero de todas ellas le librará Jehová. 20 Él guarda todos sus huesos; Ni uno de ellos será quebrantado. 21 Matará al malo la maldad, Y los que aborrecen al justo serán condenados. 22 Jehová redime el alma de sus siervos, Y no serán condenados cuantos en él confían.
Un Asunto De Fe
Caminar en Dios sin importar lo que sentimos o vemos es fe. Por supuesto que Dios quiere que le sientas, pero prefiere que confíes en el. Dios es real sin importar como te sientas. Bendecir, alabar, adorar, servir, amar al Señor es fácil cuando todo marcha bien en nuestra vida.
¿Porque Nos Sentimos Alejados De Dios?
Esto se puede dar por varias razones:
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Tribulación, Salmo 10: 1 ¿Por qué estás lejos, oh Jehová, Y te escondes en el tiempo de la
tribulación?
- Angustia, Salmo 22: 1 Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado? ¿Por qué estás tan
lejos de mi salvación, y de las palabras de mi clamor? 2 Dios mío, clamo de día, y no respondes; Y
de noche, y no hay para mí reposo.
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Injusticia, opresión y lucha, Salmo 43: 1Júzgame, oh Dios, y defiende mi causa; Líbrame de
gente impía, y del hombre engañoso e inicuo. 2 Pues que tú eres el Dios de mi fortaleza, ¿por qué
me has desechado? ¿Por qué andaré enlutado por la opresión del enemigo?
-
Aflicción, Salmo 88: 13 Mas yo a ti he clamado, oh Jehová, Y de mañana mi oración se presentará
delante de ti. 14 ¿Por qué, oh Jehová, desechas mi alma? ¿Por qué escondes de mí tu rostro? 15
Yo estoy afligido y menesteroso; Desde la juventud he llevado tus terrores, he estado medroso. 16
Sobre mí han pasado tus iras, Y me oprimen tus terrores. 17Me han rodeado como aguas
continuamente; A una me han cercado. 18 Has alejado de mí al amigo y al compañero, Y a mis
conocidos has puesto en tinieblas.
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Por el trato de Dios, en valles, desiertos, enfermedades, escasez, tristeza, soledad, frustración,
depresión, desanimo y pecado. Deuteronomio 8: 2 Y te acordarás de todo el camino por donde te
ha traído Jehová tu Dios estos cuarenta años en el desierto, para afligirte, para probarte, para
saber lo que había en tu corazón, si habías de guardar o no sus mandamientos
Ejemplo de gente de Dios que sufrió estrés.
Moisés.
Números 11 leer 1 al 17.
Importancia De Los Sentimientos En La Vida Cristiana
Tres consideraciones nos ayudarán a responder a esta pregunta como conclusión al tema: La fe es una experiencia global: Mateo 22: 37 «con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente»
La vida espiritual, la fe, implica a toda la personalidad humana, no a una sola de sus dimensiones:
La voluntad, que se manifiesta en decisiones;
La mente, que se manifiesta en pensamientos, y
El corazón o las emociones que se expresan en sentimientos.
Estas tres partes deben guardar un equilibrio armónico porque ninguna de ellas es mejor o superior a las demás.
La fe debe tener sentimientos; no puede consistir en un ejercicio frío, intelectual.
Pero no puede ser sólo emocional porque ello sería como espuma que se desvanece y no permanece. Lo mismo podríamos decir de la mente y de la voluntad.
En la vida de fe equilibrada toda la personalidad está en acción y no sólo una parte de ella.
Debemos acercarnos a Dios de la misma forma que se nos pide que le amemos: «con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente» (Mt. 22:37).
Evitando la hipocondría espiritual
La fe y la oración no es algo que ocurre sólo dentro de nosotros. No ocurre dentro ni tampoco fuera.
Ocurre entre nosotros y Dios.
Es una relación entre Dios y nosotros.
Debemos librarnos de centrar nuestra preocupación sobre el estado interior: «¿qué siento?, ¿cómo estoy?». La mirada debe fijarse en Dios.
Cuando dejamos de mirar al Señor para fijarnos en nosotros mismos quedamos expuestos a una tentación sutil de Satanás: la hipocondría espiritual, es decir una preocupación excesiva por mi «salud» espiritual.
La introspección es buena porque puede proporcionar luz; pero demasiada introspección nos puede convertir en cristianos neuróticos, más pendientes de nosotros mismos que de Cristo. La exhortación de Heb. 12:2, «puestos los ojos en Jesús»,
Esta es la fuente de salud espiritual porque nos libra de caer en un auto-examen excesivo que conduce a la parálisis.
C.S. Lewis escribió en su libro «Cartas a un diablo novato»: «Mantén la mente de tu paciente concentrada en su vida interior... que su atención se enfoque principalmente sobre sus propios estados mentales».
Este es el consejo que el diablo le da a su aprendiz a fin de hacer fracasar la vida de oración del creyente recién convertido.
Tres consideraciones nos ayudarán a responder a esta pregunta como conclusión al tema: La fe es una experiencia global: Mateo 22: 37 «con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente»
La vida espiritual, la fe, implica a toda la personalidad humana, no a una sola de sus dimensiones:
La voluntad, que se manifiesta en decisiones;
La mente, que se manifiesta en pensamientos, y
El corazón o las emociones que se expresan en sentimientos.
Estas tres partes deben guardar un equilibrio armónico porque ninguna de ellas es mejor o superior a las demás.
La fe debe tener sentimientos; no puede consistir en un ejercicio frío, intelectual.
Pero no puede ser sólo emocional porque ello sería como espuma que se desvanece y no permanece. Lo mismo podríamos decir de la mente y de la voluntad.
En la vida de fe equilibrada toda la personalidad está en acción y no sólo una parte de ella.
Debemos acercarnos a Dios de la misma forma que se nos pide que le amemos: «con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente» (Mt. 22:37).
Evitando la hipocondría espiritual
La fe y la oración no es algo que ocurre sólo dentro de nosotros. No ocurre dentro ni tampoco fuera.
Ocurre entre nosotros y Dios.
Es una relación entre Dios y nosotros.
Debemos librarnos de centrar nuestra preocupación sobre el estado interior: «¿qué siento?, ¿cómo estoy?». La mirada debe fijarse en Dios.
Cuando dejamos de mirar al Señor para fijarnos en nosotros mismos quedamos expuestos a una tentación sutil de Satanás: la hipocondría espiritual, es decir una preocupación excesiva por mi «salud» espiritual.
La introspección es buena porque puede proporcionar luz; pero demasiada introspección nos puede convertir en cristianos neuróticos, más pendientes de nosotros mismos que de Cristo. La exhortación de Heb. 12:2, «puestos los ojos en Jesús»,
Esta es la fuente de salud espiritual porque nos libra de caer en un auto-examen excesivo que conduce a la parálisis.
C.S. Lewis escribió en su libro «Cartas a un diablo novato»: «Mantén la mente de tu paciente concentrada en su vida interior... que su atención se enfoque principalmente sobre sus propios estados mentales».
Este es el consejo que el diablo le da a su aprendiz a fin de hacer fracasar la vida de oración del creyente recién convertido.
Sentir a Dios o Sentido de Dios
Necesitamos cultivar la presencia de Dios en nuestra vida. Para ello hemos de distinguir entre sentir a Dios y el sentido de Dios. Son realidades distintas.
Sentir a Dios constantemente es imposible porque mientras siento no puedo hacer otra cosa, requiere una atención exclusiva, de lo contrario el sentimiento desaparece.
En cambio, desarrollar el sentido de Dios en mi vida es tomar conciencia de la presencia continua del Señor en mí; expresándolo en otras palabras, es tener conciencia de Dios.
Esto constituye una actitud vital. Yo puedo estar inmerso en una tarea absorbente y, por tanto, incapaz de sentir a Dios. Pero sé, soy consciente de que Dios está ahí, conmigo y a través de su Espíritu- dentro de mí.
Tenemos que desarrollar «una conversación con Dios habitual, silenciosa, secreta». Y su consejo era que «debemos desarrollar el sentido de la presencia de Dios conversando continuamente con él».
La Biblia describe esta hermosa realidad espiritual con expresiones como «ser temeroso de Dios» o «vivir en el Espíritu».
Dios es tan central en nuestra vida, está tan presente que lo preside todo. Es «caminar con Dios» como hizo Enoc (Gn. 5:24). Es vivir «como viendo al Invisible» (Heb. 11:27).
Es requerir la presencia del Señor en nuestro andar diario: «Si tu Presencia no ha de ir conmigo...» (Éx. 33:15).
Esta debe ser la meta primera de nuestra fe: vivir con y para Dios, no tanto sentirle cerca.
En el momento en que dejes de obsesionarte con los sentimientos, éstos fluirán de manera natural y paulatina.
¿Qué haces cuando Dios parece estar distante?
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La mejor adoración es aquella que se produce en nuestra vida a pesar de toda circunstancia.
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La mejor prueba de amor, amistad y confianza es la separación, la distancia y el silencio.
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Mientras estas al lado de la persona que amas, por ejemplo, TODO PARECERA ESTAR BIEN,
esto es una percepción de la LOGICA.
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Pero cuando hay distancia y silencio por medio, ENTONCES EL AMOR ES PROBADO. Sus
bases con perfectamente comprobables y muchas veces descubrimos que en verdad dichas bases
eran DEBILES por no decir INEXISTENTES.
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Una relación verdadera y madura se fortalece tanto en la intimidad como en la distancia.
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Si no tienes una relación INTIMA, DIARIA Y FUERTE por medio de la FE con Dios, entonces
tampoco resistirás la PRUEBA DE LA DISTANCIA Y EL SILENCIO DE DIOS
¿Que debemos hacer cuando esto suceda?
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Hablar con EL
Job 7: 11Por tanto, no refrenaré mi boca; Hablaré en la angustia de mi espíritu, Y me quejaré con la amargura de mi alma.
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Derrama tu corazón delante de El.
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Reconoce como te sientes y confiésaselo a El, esto es un acto de fe: Porque crees en Dios, sabes que te escucha, te entiende y te fortalecerá, Hebreos 4: 15Porque no tenemos un sumo sacerdote
que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según
nuestra semejanza, pero sin pecado. 16Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia,
para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.
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Nunca dudes en la oscuridad de lo que Dios te ha hablado en la luz.
Alábale y Adórale -
Salmo 32: 6 Por esto orará a ti todo santo en el tiempo en que puedas ser hallado; Ciertamente en la
inundación de muchas aguas no llegarán éstas a él. 7 Tú eres mi refugio; me guardarás de la angustia;
Con cánticos de liberación me rodearás.
Salmos 43: 3Envía tu luz y tu verdad; éstas me guiarán; Me conducirán a tu santo monte, Y a tus moradas. 4Entraré al altar de Dios, Al Dios de mi alegría y de mi gozo; Y te alabaré con arpa, oh Dios, Dios mío. 5¿Por qué te abates, oh alma mía, Y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, Salvación mía y Dios mío.
El hecho de que no sientas su presencia quiere decir que el te ha abandonado. Dios a veces se oculta pero note abandona ni te desampara.